Reuniones con ANA y SERNANP

Una representación de la Comunidad Cruz de Mayo y de CEAS se reúne con los responsables del ANA y el SERNANP

Una delegación de la Comunidad Cruz de Mayo y la Conferencia Episcopal de Acción Social (CEAS) se ha reunido con los máximos responsables de la Autoridad Nacional del Agua (ANA) y del Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas (SERNANP) para trasladarles información de primera mano sobre los conflictos socioambientales relacionados con la gestión del agua de la Laguna Parón y con la concesión minera Malú I, en la municipalidad de Huaylas.

A los encuentros, que tuvieron lugar los días 31 de agosto y el 1 de septiembre en Lima, acudieron el presidente de la comunidad campesina, Carlos Milla, y el dirigente Adán Pajuelo, acompañados por asesores de CEAS.

Los comuneros informaron a los responsables públicos la inquietud que les causa que la empresa estadounidense Duke Energy haya logrado que el Tribunal Constitucional le restituya la licencia de uso del agua de la Laguna Parón, un recurso hídrico que se encuentra dentro del Parque Nacional Huascarán (declarado patrimonio de la humanidad por UNESCO). El uso abusivo del agua por parte de la empresa les ocasionó grandes perjuicios en el pasado y puso en peligro a la propia laguna y los glaciares que la rodean.

En este sentido, explicaron cómo la insostenibilidad social y ecológica de la situación llevó a los comuneros a recuperar las instalaciones de la laguna por medios exclusivamente pacíficos en 2008, tras casi 15 años viendo una y otra vez sus medios de vida arrasados y su laguna agonizar por el desmesurado caudal de agua que desembalsaba la empresa.

También dieron cuenta del atentado ecológico que supone que se haya permitido una concesión minera (denominada Malú I) que se interna dentro de un área natural protegida como el Parque Nacional Huascarán. La concesión para extraer oro, adjudicada actualmente a la minera canadiense Coronet Metals, constituiría además un gran riesgo para las fuentes de agua de toda la zona, al situarse en cabecera de la cuenca Parón-Llullán.

El coordinador general del ANA, Marco Antonio Núñez del Prado, y sus asesores escucharon las peticiones de los campesinos y se ciñeron a sus competencias en materia de gestión de aguas para evaluar las medidas a tomar, aunque no se comprometieron a fijar ninguna fecha para anunciar alguna decisión, tal y como solicitó la delegación comunera.

Por su parte, el coordinador del Sernanp, Sandro Chávez, recibió con atención los argumentos de la delegación en torno a los problemas del agua y la minería y se comprometió a analizar las medidas que podrían llevarse a cabo y a darlas a conocer en un plazo aproximado de dos semanas.

Los líderes comuneros mostraron su esperanza de que el nuevo Gobierno tome cartas en el asunto para proteger el medio ambiente y los derechos de los agricultores.